Archivo de la etiqueta: Arqueología

Nueva evidencia arqueológica de presencia humana «temprana» en Monte Verde, Chile

«Si su equipo está en lo correcto, el descubrimiento sacudirá tanto la arqueología y la genómica del poblamiento de las Américas» dice el arqueólogo Jon Erlandson, de la Universidad de Oregon en Eugene.

¿Cómo, por qué medio, hace cuántos años llegó el hombre al continente Americano? Es una pregunta que científicos y en este caso arqueólogos están tratando de descifrar.

Al sur de Chile, específicamente en Puerto Montt se encuentra Monte Verde, el lugar que científicos extranjeros y chilenos le han dedicado su atención desde la década de los 70.

journal.pone.0141923.g001

Guiados por el arqueólogo Tom Dillehay, conocido por la investigación que causó revuelo décadas atrás por afirmar que los humanos ocuparon Sudamérica hace 14.500 años, esta nueva investigación en la zona de Monte Verde abrirá un nuevo debate.

En la publicación informa que las personas en Monte Verde construyeron fogatas, cocinaron plantas y carne, además de la construcción de herramientas hace 18.500 años, lo que hace retroceder el poblamiento de las Américas por unos 4000 años.

journal.pone.0141923.g004

Investigaciones anteriores y estudios genéticos sugieren que los antepasados ​​de los paleoindios primero dejaron Siberia hace no más de 23.000 años (http://www.sciencemag.org/content/349/6250/aab3884.abstract), por lo que las nuevas fechas de Dillehay sugieren que no perdieron mucho tiempo en alcanzar el extremo sur de las Américas.

Además, el hallazgo plantea preguntas sobre el comienzo de la población en América del Norte, donde nadie ha encontrado pruebas ampliamente aceptadas de la ocupación antes de hace 14.300 años. «¿Dónde diablos estaban las personas en América del Norte a esa hora?», se pregunta el arqueólogo David Meltzer, de la Universidad Metodista del Sur en Dallas, Texas.

journal.pone.0141923.g006

En la excavación realizada el 2013, aparecieron 39 artefactos de piedra, incluyendo hojuelas, cuchillas, y “cores” (subproducto de la fabricación de herramientas), cerca de las plantas o los huesos de animales que habían sido quemados en incendiados en 12 áreas. Esto sugiere una «presencia efímera irregular», dice Dillehay.

La datación por radiocarbono estima que las plantas y los huesos de animales pertenecen al periodo de 14.500 y 18.500 años, y quizás hasta 19.000 años. La última edad de hielo estaba empezando a decaer en ese momento, dejando un fresco bosque templado lluvioso en Monte Verde, a unos 60 kilómetros del Océano Pacífico. Dillehay especula que los primeros paleoindios se trasladaron a lo largo de los corredores desglaciaciados entre la costa y los Andes, cazando llamas paleo (https://es.wikipedia.org/wiki/Palaeolama) y gonfotéridos (https://es.wikipedia.org/wiki/Gomphotheriidae)

Pero como siempre debe haber debate, no todo el mundo está convencido, el arqueólogo Michael Waters de Texas A & M University en College Station, se pregunta si los artefactos de piedra eran en realidad creados por el hombre, y dice que el equipo no ha eliminado la posibilidad de que los incendios (rastros de fogatas) eran naturales.

Dillehay admite que su equipo encontró algunas herramientas de piedra que indudablemente son hechas por la mano del hombre. Sin embargo, señala que alrededor de un tercio de las herramientas fueron hechas a partir de materiales exóticos, como la piedra caliza y cuarzo blanco desde fuera del área, lo que sugiere que las personas transportaban la piedra.
Meltzer encuentra esto atractivo. «Las muestras no gritan ‘hecha por la mano del hombre’ «, él está de acuerdo, «pero el grupo de Dillehay ha hecho una evaluación cuidadosa de su forma y la materia prima … Es una prueba que no podemos ignorar.»

Esperemos que se siga trabajando en esta zona, para poder recabar mas información y así seguir con este debate tan interesante. Por último destacar la participación del Instituto de Ciencias de la Tierra, Universidad Austral de Chile, Valdivia, Chile en la elaboración de este artículo.

Fuentes:
PLOS ONE
Science, AAAS

¿Por qué Jurassic Park es imposible?

Cuando aún era una niña y vi Jurassic Park por primera vez pensé que en un futuro la ciencia nos iba a permitir disfrutar de estos extinguidos animalitos en un hermoso parque, pero por supuesto de una forma segura, no como en la película donde todo es tragedia. Pero esta idea parece ser imposible, ya que humanos y dinosaurios no están destinados a coexistir, y la razón no esta basada en lo trágico que esto podría ser, sino en la ciencia: los fósiles de dinosaurios son demasiado viejos para contener material genético que pudiese ser utilizado para la clonación, ya que el ADN se descompone con el tiempo, incluso si se mantiene en condiciones ideales.

En un principio podría ser extraño pensar que el ADN tiene una vida media ya que este termino esta comúnmente asociado a los materiales radioactivos. La vida media, es el promedio de vida por ejemplo de una partícula antes de que se desintegre. Por ejemplo, el uranio-235, el material que se puede utilizar en plantas de energía nuclear (y armas nucleares), tiene una vida media de 703.800.000 años. En cambio el ADN, según un estudio, presentado en Proceedings of the Royal Society B, parece tener una vida media de alrededor de 521 años.

moa-poo
Imagen Artística de moas

En este estudio se analizaron 158 muestras de huesos de moa de entre 500 y 6.000 años de antigüedad. Los moa son las aves no voladoras más grandes encontradas y solían vivir donde hoy se encuentra Nueva Zelanda. Todos los huesos analizados se han recogido dentro de un radio de cinco kilómetros, y se estima que fueron enterrados a una temperatura media de 13 grados centígrados, después que murieron los pájaros.

Promediando los resultados de los diferentes huesos dio como resultado una vida media promedio de 521 años, pero no se puede despreciar que además hay muchos factores que también pueden afectar a la tasa de descomposición: la acidez del suelo, la salud ósea, temperaturas extremas, humedad, etc. Sin embargo, este resultado proporciona una línea de base para evaluar la viabilidad de la obtención de muestras de ADN de los hallazgos futuros.

Muestras de ADN de Neandertal se han encontrado en dientes con 100.000 años de edad, y New Scientist informa que también hay pequeños fragmentos de ADN de insectos y plantas de cientos de miles de años de antigüedad que se encuentran en los núcleos de hielo, pero este material ya esta demasiado decaído para ser utilizado para la clonación.

El moa en teoría podría ser clonado, si se encuentra una cantidad suficiente de ADN. Se piensa que el moa debió haber sido cazado hasta la extinción por los maoríes de Nueva Zelanda antes de la llegada de los colonos europeos en la década de 1700, que no es tiempo suficiente para los estándares de ADN.

 

Fuentes: New Scientist ,  Proceedings of the Royal Society B

 

Nuevo estudio a niños Incas momificados naturalmente.

Doncella Inca

Esta niña murió a los 13 años de edad y fue colocada en un altar en la cima de la montaña de los Andes Argentinos como un sacrificio a los dioses. Allí estuvo por aproximadamente 500 años, hasta que en 1999 los arqueólogos recuperaron su cuerpo congelado junto con los de otros dos niños sepultados por separado, un niño y una niña de entre cuatro y cinco años de edad. Los investigadores han reconocido desde hace tiempo que los tres jóvenes, llamados La doncella Llullaillaco, el niño y la niña relampago Llullaillaco, fueron víctimas del ritual Inca de sacrificio de niños, o capacocha. Un nuevo estudio a sus restos momificado naturalmente esclarece los acontecimientos que condujeron a su entierro.

Doncella Inca
Tomografía que muestra las hojas de coca que masticaba la doncella Inca antes de morir

Los análisis químicos de los cabellos de los niños muestran que los tres recibieron hojas de coca y alcohol antes de morir. Doce meses antes de que se mató a la joven de 13 años, su consumo de coca aumentó. Mientras tanto, su consumo de alcohol, probablemente en forma de chicha, que por lo general se hace de maíz llegó a su máximo en sus últimas semanas. Una tomografía computarizada reveló un gran fajo de hojas de coca en su boca la cual había estado masticando en sus momentos finales. Andrew S. Wilson, de la Universidad de Bradford en el Reino Unido y sus colegas describen los hallazgos en un informe que será publicado en línea esta semana en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias de EE.UU..

La naturaleza exacta del evento o eventos que llevó al sacrificio de estos niños es desconocida. Podría haber sido una ocasión anual Inca, o podría haber sido un incidente imprevisto, como la muerte de un gobernante o de un desastre natural. En cualquier caso, la doncella recibió significativamente más hoja de coca que los niños más pequeños, lo que sugiere «una mayor necesidad de sedarla a ella», informaron los investigadores. La postura del cuerpo de la niña y la disposición tranquila de sus prendas y artefactos ceremoniales que la rodeaban indican que estaba muy sedada o muerta cuando fue colocada en el altar.

«La coca y el alcohol son sustancias que inducen estados alterados interpretados como sagrados, esto sugiere que las víctimas y los asociados con ellos se aproximan a seres divinos cuya continua benevolencia fue suscrito por estos ritos», escribió Wilson y sus co-autores. «Desde una perspectiva inter-cultural, el amortiguamiento psicológico, la desorientación y los estados de ánimo modificados son efectos de estos compuestos psicoactivos en las víctimas jóvenes, así ellos no pueden sospechar facilmente su propia muerte, por lo que no debe ser restada importancia.»

En cuanto a los padres obligados a sacrificar a sus hijos, ellos lo habrían hecho con una sonrisa si sabían lo que era bueno para ellos. Los autores señalan que de acuerdo con los 1.653 escritos del español misionero jesuita Bernabé Cobo, «era una ofensa mayor mostrar cualquier tipo de tristeza,» y que «se vieron obligados a hacerlo con gestos de felicidad y satisfacción, como si fueran a otorgarles sus hijos un premio muy importante.»

El pase de diapositivas requiere JavaScript.

Fuente: http://www.scientificamerican.com/article.cfm?id=scientists-to-discuss-uni&WT.mc_id=SA_Facebook

http://differentphotos4you.blogspot.ca/2013/07/incan-girl-who-had-been-frozen-for-500.html

Joyas hechas con meteoritos en el antiguo Egipto

Busto de la reina egipcia Nefertiti, en el Neues Museum de Berlín
Busto de la reina egipcia Nefertiti, en el Neues Museum de Berlín

Científicos ingleses de The University of Manchester y  la Open University encontraron evidencias de que los antiguos egipcios usaban fragmentos de meteoritos para fabricar abalorios (cuentas o mostacillas). ¿Cómo llegaron a esta conclusión? En 1922, en el cementerio de Gerzeh, de unos 70 km y ubicado al sur de El Cairo, se lograron recuperar collares hechos con cuentas de hierro.

Los abalorios analizados datan de entre el 3350 y el 3600 AC, mucho antes de la Edad de Hierro de Egipto (que comenzó cerca del 1200 AC). En un principio, se creyó que estos abalorios eran en realidad meteoritos ya que eran ricos en hierro y níquel. Pero esta hipótesis fue cuestionada en los años 80, cuando se propuso que gran parte de las primeras evidencias de uso del hierro (y que se pensaba tenían su origen en meteoritos), eran en verdad intentos de fusión temprana.

ancient-egyptians-crafted-jewelry-from-meteorites-130530-670x440
Cuatro imágenes de uno de los abalorios. En sentido horario, desde la parte superior izquierda, tenemos: una fotografía, una vista en sección transversal CT, un modelo de óxidos de níquel, y un modelo en el que las áreas azules representan la rica presencia de níquel en el interior del abalorio.

Las cuentas halladas en Gerzeh fueron cedidas por el Museo de Manchester a la Escuela de Materiales de la Universidad de Manchester para hacer una prueba adicional, en la que se utilizó una combinación de microscopio electrónico y rayos X. Mediante esta técnica, se comprobó que la composición química rica en níquel de los abalorios confirmaba su origen en un meteorito.

Según Diane Johnson, directora de esta investigación, el estudio «pone de relieve que la aplicación de la tecnología moderna a los materiales antiguos no sirve sólo para entender mejor los meteoritos, sino también para ayudarnos a entender lo que las culturas antiguas consideraban que eran estos materiales y la importancia que se les daba»

 El artículo se publica en el «Meteoritics and Planetary Science Journal» (pero no logré encontrarlo, lo siento :c ). Y pueden revisar nuestras fuentes europapress y abc.

 

Canibalismo Colonial

Primero empezare recalcando que esta nota surgió por dos razones, la primera, hace unas semanas me puse a ver  Sweeny Tood (como por tercera vez) pero por alguna razón, me quedo dando vueltas la idea de comer carne humana, y si se justifica dadas las circunstancias y porque llegar a tal extremo, y la segunda razón, me dije, «debería escribir algo que no sea Astronomía»

Jane
Jane
Credit: StudioEIS, Don Hurlbert/Smithsonian

La muchacha que ven aquí, es Jane, sus restos óseos fueron encontrados en el antiguo asentamiento ingles de Jamestown, cerca del Río James (Virginia, costa este de EE.UU).  Este lugar fue el hogar de muchos ingleses que cruzaron el Atlántico en busca de nuevas oportunidades, pero que al llegar, la vida no se les hizo muy fácil  Los inviernos en esta época 1609-1610 fueron desastrosos, según relatos históricos, debido a enfermedades y hambruna, los residentes podían comer desde ratones, botas hervidas hasta a sus propios vecinos.

Jane vino a corroborar estas historias, los investigadores encontraron su cráneo y tibia, los cuales fueron claves al determinar que la carne fue extirpada después de su muerte, así como también  los cortas en el hueso dan detalles del modus operandi.  Douglas Owsley, antropólogo en Washington, dice: » La persona que hizo esto fue muy vacilante y no tenia experiencia en este tipo de actividad». Actualmente esta linda chica será exhibida en el museo Histórico de Jamestown.

Mas detalles sobre Jane y el equipo de investigación en el vídeo:

 

Fuente:

Descubren restos arqueológicos de dos ciudades perdidas en Honduras

 

selva-honduras--644x362La leyenda cuenta que en la región de La Mosquitia, Honduras , existía una ciudad conocida como «La Ciudad Blanca». Esta ciudad contenía vastas cantidades de oro y fue el supuesto lugar de nacimiento de la serpiente Quetzalcoatl.  Esta leyenda es la más conocida de Honduras. Las ruinas de la Ciudad Blanca se venían buscando ya desde hace tiempo y ya se tenían identificadas algunas posibles ubicaciones.

Según informa el sitio de Nature, los científicos del «National Center for Airborne Laser Mapping» (NCALM) han identificado estructuras de lo que podría ser no una, sino dos ciudades perdidas en la selva de Honduras.

UTL-main

En 2012, los investigadores del «NCALM» montaron un sistema LIDAR en un avión y se dirigieron a Honduras.  LIDAR hace rebotar miles de millones de pulsos láser sobre el terreno del bosque y mide el tiempo que demoran en volver. Aunque la mayor parte de los pulsos es reflejado en la vegetación, una pequeña fracción alcanza el piso. Gracias a esto, se puede construir un mapa de la superficie, quitando matemáticamente el dosel de las hojas de los árboles (ver figura a la derecha).

El equipo de NCALM sobrevoló partes del terreno de la que se conocía muy poco, entre éstas, 4 lugares en el bosque de Mosquitia. Todos eran posibles ubicaciones de las ruinas de la mítica Ciudad Blanca. Hay exploradores que han buscado esta ciudad perdida por décadas, aunque muchos arqueólogos creen que puede ser un mito o quizás una amalgama de otras ciudades Mesoamericanas.

Screen Shot 2013-05-18 at 9.41.29 PMEntre los resultados presentados, podemos encontrar montículos regularmente espaciados y otras características lineales que componen al menos dos ciudades (en la figura, la forma rectangular abajo en el centro, tiene aproximadamente 50 metros de largo).

Los científicos pretenden identificar la mayor cantidad posible de estructuras para poder observarlas luego en terreno. Los planes son enviar un helicóptero a esta área en noviembre y seleccionar ciertos lugares para que sean investigados por arqueólogos.

Fuentes: Nature y abc.